Peritos de seguros: el profesional en el corazón del siniestro

Publicidad

Sin temor a equivocarnos, el perito de seguros es un profesional esencial a la hora de resolver un percance cubierto en la póliza, no solamente porque tiene en sus manos la valoración de los daños y la indemnización, sino también por su presencia en el corazón del momento de la verdad: el siniestro. 

«Le enviamos un perito». Todos hemos oído con cierto alivio esta frase en alguna ocasión. Si hemos sufrido un percance en casa, con el coche o en el negocio, toca hacer uso de nuestra póliza de seguros, obligatoria en algunos casos, y muy recomendable en todos ellos.   

Así que, superado el susto o el disgusto, lo primero que debemos hacer es llamar a nuestra compañía para dar parte del siniestro o del accidente y esta, si así lo considera, nos enviará a un perito, que también puede contratar el propio cliente.   

Quién es exactamente esta figura, cuál es su función y la importancia que tiene en el mundo asegurador, es lo que vamos a explicar a continuación. 

De profesión, perito de seguros 

Básicamente, se trata de un experto en la materia a la que afecta el seguro en cuestión y, dada la variedad de su naturaleza, puede ser un titulado universitario (Ingeniería, Arquitectura, Medicina, Informática, Empresariales, Derecho…) o alguien que ostente un grado superior en una formación profesional reglada.   

Lo que siempre es necesario es que haya realizado un curso homologado de peritaje de seguros, para conocer en profundidad cómo funciona este sector y su legislación, así como contar con una especialización en el ámbito en el que vaya a desarrollar su trabajo. Así, podemos encontrar peritos de seguros de autos, de incendios y riesgos diversos, de embarcaciones de recreo, de salud y agrarios, entre otros, en función del área en la que trabajen.   

Publicidad

La creciente complejidad de los siniestros, especialmente en entornos como los riesgos cibernéticos y la responsabilidad civil, exige cada vez mayor nivel de especialización técnica y preparación, por lo que su formación es continua.   

¿Cuáles son sus funciones? 

La función principal de este profesional independiente es determinar y analizar las causas de un siniestro, recopilar pruebas en el lugar de los hechos o sobre el objeto asegurado; y elaborar un informe detallado donde se expongan los daños sufridos y sus causas, siempre sobre la base de la objetividad.  

Con los datos en sus manos, también es el encargado de determinar los costes de la reparación y de establecer la cuantía de la indemnización, atendiendo a las coberturas del seguro, según cada caso.  

Con estos dos roles ya podemos intuir que sin esta figura difícilmente se podrían tramitar siniestros como un accidente con nuestro vehículo, un robo en el hogar, una inundación o un incendio en nuestro negocio. 

En la era digital, su papel ha evolucionado significativamente. De hecho, tecnologías emergentes como la inteligencia artificial y el big data están redefiniendo su labor. Las aseguradoras están implantando herramientas para facilitar el trabajo de los peritos, como la videoperitación o aplicaciones donde subir imágenes, lo que agiliza enormemente el proceso en beneficio del cliente. 

Un pilar esencial  

En resumen, los peritos de seguros han sido siempre un pilar básico en la industria aseguradora. Su conocimiento técnico especializado es esencial a la hora de evaluar con precisión los siniestros y la determinación de los costes de reparación o reemplazo.   

Además, por su alto grado de conocimiento en los campos a tratar contribuyen a evitar posibles fraudes y malas prácticas, aportando seguridad, tanto a los clientes como a las propias aseguradoras, sobre una correcta y justa aplicación de la póliza de seguros en caso de siniestro.   

Pero, además, estos profesionales en el ejercicio de sus funciones trascienden muchas veces sus tareas puramente técnicas, así como la realización de evaluaciones meticulosas e informes detallados, al ser en muchas ocasiones los primeros en llegar a la escena después del incidente.  

Los peritos se convierten, así, en el rostro humano de la industria de seguros en los momentos más difíciles de los asegurados, dándoles tranquilidad y contribuyendo a la correcta solución del siniestro.  

Publicidad

- Publicidad -

- Publicidad -

- Publicidad -

- Publicidad -