La ciberseguridad, clave para las finanzas en 2024

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Marcará tendencia este año, junto a la IA y el endurecimiento monetario.

El panorama de las finanzas en 2024 se presenta novedoso, desafiante, riesgoso. Sin ninguna duda que la IA jugará un rol central en las grandes transformaciones que están en marcha en el sector, pero esto llega también con un hemisferio oscuro.

Se prevé que la ciberseguridad juegue un rol creciente y cada vez más crítico en el desempeño de la banca y otros actores, entre ellos los bursátiles.

En un mundo cada vez más digitalizado, el panorama de las amenazas cibernéticas se torna cada vez más complejo. Se prevé un incremento en el uso de IA, tanto por parte de actores institucionales como delincuenciales, con una mayor sofisticación en los casos de ransomware. Esto se agrava dada una creciente vulnerabilidad de las cadenas de suministro de software, señala un reciente reporte de la reputada consultora financiera Kroll.

Más aún, la incertidumbre política y la volatilidad del mercado subrayan la importancia de la diligencia y la valoración precisa en este entorno dinámico, señala Kroll en su documento sobre las tendencias en el sector financiero para 2024.

IA.

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En un panorama de ciberamenazas en constante evolución, se espera un mayor uso de la IA tanto en ciberataques como en defensa, con un aumento de las embestidas contra las cadenas de suministro de software, además de ataques de ransomware cada vez más sofisticados y precisos. Los actores de amenazas seguirán explotando las vulnerabilidades de día cero y día único, apuntando a los trabajadores remotos y la infraestructura asociada. En 2023 ya se vio lo efectivas y costosas que pueden resultar estas acciones por parte de piratas informáticos. Los peligros para el correo electrónico empresarial seguirán representando una amenaza para todas las organizaciones y la seguridad digital se volverá cada vez más compleja a medida que más organizaciones migren a soluciones basadas en la nube. El cumplimiento normativo y la privacidad de los datos no harán más que crecer en importancia. Con tantas áreas de riesgo, la necesidad de vigilancia y estrategias efectivas de ciberseguridad es mayor que nunca.

En criterio de los analistas de Kroll, lo más probable es que el rápido surgimiento de la IA se acelere en los sectores bancario, financiero y bursátil, con un profundo impacto en cada uno de ellos. La IA será una herramienta crucial en la gestión de riesgos, ya que ayudará a detectar y prevenir cuestiones y problemas, desde delitos cibernéticos hasta irregularidades financieras, al tiempo que plantea su propio conjunto de riesgos. Los reguladores, tanto en Estados Unidos como en Europa, están luchando por mantenerse al día. El acuerdo preliminar de la Unión Europea sobre una regulación integral de la IA y las reglas iniciales propuestas por la Comisión de Valores y Bolsa (SEC, por su sigla en inglés) de Estados Unidos, relacionadas con la IA son solo la punta del iceberg de cambios regulatorios inminentes. Los riesgos de IA no mitigados e incontrolados podrían exponer a los asesores de inversiones y proveedores de servicios financieros a responsabilidades de reputación, aplicación y examen en una amplia gama de preocupaciones regulatorias en torno a la IA. Los gerentes comerciales y los responsables de cumplimiento deben tomar medidas ahora para comprender los riesgos de la IA y cómo mitigar el riesgo de incumplimiento al adoptar herramientas de IA en las operaciones en el lugar de trabajo.

BIENES.

Las valoraciones de las acciones públicas en Estados Unidos y en algunos mercados europeos han alcanzado niveles récord y las ganancias corporativas se mantienen en niveles históricamente elevados. La economía mundial sorprendió positivamente a la mayoría de los pronosticadores durante 2023, gracias en parte a la resiliencia de Estados Unidos y a una rápida caída de los precios de la energía a nivel mundial. Si bien se espera que el crecimiento global general se desacelere en 2024, parece estar surgiendo una doble vía, con ciertos mercados asiáticos encabezando y economías avanzadas avanzando a tropezones.

En medio de este telón de fondo, una economía en contracorriente acecha justo debajo de la superficie en el enorme, pero menos visible, segmento del mercado privado que todavía está muy sobreapalancado alrededor del mundo. Los casos recientes de quiebra de inmobiliarias en China son acompañados por señales de alerta, tanto en Estados Unidos como en algunos países europeos.

Esto presagia más reestructuraciones en el futuro y restablecimientos de valor que podrían crear importantes repercusiones económicas, con el sector inmobiliario comercial, particularmente en Estados Unidos, entre los sectores más vulnerables. Esto fue ya ilustrado por la quiebra de We- Work, por ejemplo.

La turbulencia política del año electoral y los factores de volatilidad del mercado no hacen más que aumentar la incertidumbre, subrayando la importancia de sortear eficazmente la complejidad y el imperativo de contar con información de calidad, particularmente en torno a las gestiones de diligencia debida y valoración.

ENCARECIMIENTO.

Después de que la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos aumentara agresivamente las tasas de interés en 2022 y 2023 para frenar la inflación, los mercados financieros se vieron afectados por el encarecimiento del dinero, lo que incidió sensiblemente en nuevos proyectos y en las economías emergentes. Los analistas de Kroll predicen actualmente recortes de las tasas de interés referenciales en 2024. Si bien es probable que los tipos hayan alcanzado su punto máximo, la Fed actuará con cautela en cuanto al momento y el ritmo para evitar una reducción prematura que podría reavivar la inflación. Los bancos centrales del Reino Unido y de la eurozona están siguiendo el ritmo que marca el banco central norteamericano.

Incluso con algunos recortes de tipos, si los mismos se mantienen elevados durante un período prolongado, es probable que en 2024 se produzca una mayor actividad de reestructuración. Dado que un volumen importante de deuda vence en el corto plazo, más empresas necesitarán volver a optimizar sus estructuras de capital para obtener nueva liquidez y desapalancamiento, lo que generará bastantes dificultades, particularmente en los segmentos del mercado altamente apalancados. Si las reestructuraciones y refinanciaciones no pueden lograrse de manera consensuada, la actividad probablemente se verá facilitada mediante un mayor uso del proceso de quiebra. Incluso a medida que las condiciones generales del mercado mejoren, se espera ver más reestructuraciones de deuda y ventas forzadas.

Si bien los mercados aún pueden experimentar una montaña rusa a la espera de que se estabilicen las tasas de interés, la continua fortaleza del gasto de los consumidores y los mercados laborales, junto con una mejora esperada en el crecimiento de las ganancias, llevará a los mercados de valores a probar nuevos máximos. Esta actitud de riesgo significa que es probable que la prima de riesgo de las acciones baje. Incluso si las tasas de interés se mantienen altas durante más tiempo de lo que algunos anticipan, una mayor certeza sobre las perspectivas de las tasas de interés puede traducirse en una prima de riesgo de las acciones más baja. Sin embargo, un escenario de tasas de interés ultrabajas no está en las cartas para 2024. Lo más probable es que el costo general del capital se mantenga alto, señala Kroll en su prospectiva.

Ahora bien, si se combinan compradores estratégicos, que sigan bien capitalizados y con importantes saldos de efectivo, más el interés en adquisiciones sinérgicas, el resultado será un mercado de adquisiciones y fusiones de oportunidad muy sólido.

Con las tasas de interés y el costo del capital estando significativamente más altos que inmediatamente después del brote de COVID-19, recientemente, a medida que la incertidumbre sobre las tasas de interés disminuyó, el escenario de un aterrizaje suave de la economía se volvió plausible. Esto ha hecho que la confianza de los inversores haya aumentado.

ESG.

Si bien las prácticas empresariales de Medioambiente, Sociedad y Gobernanza (ESG, por su sigla en inglés) se han convertido en el estándar entre las grandes corporaciones, la presión por una mayor divulgación y regulación sigue siendo fuerte. En Estados Unidos, la SEC se muestra reacia a ceder el marco regulatorio por completo a la elaboración de normas de la UE, mientras que, en la UE, la Comisión Europea y la Autoridad Europea de Valores y Mercados (ESMA, por su sigla en inglés) continúan impulsando regulaciones y requisitos centrados en ESG. En América Latina, varios países están buscando regular los mercados de carbono de la región, señala Kroll.

Se espera que los nuevos requisitos del Consejo Internacional de Normas de Valoración y del Consejo Internacional de Normas de Sostenibilidad afecten a las empresas a nivel mundial, lo que agregará complejidad y la necesidad de coordinación con varios requisitos específicos de cada país. Mientras navegan por la controversia política, las empresas y los fondos tendrán que lidiar con consideraciones ESG, desde reglas contra el lavado verde y demandas contradictorias de los inversionistas hasta nuevos requisitos y cumplimiento de informes financieros, a medida que se intensifique su aplicación y aumenten los litigios. Al mismo tiempo, se canalizarán importantes inversiones hacia vehículos de transición energética y financiación verde, creando oportunidades para empresas e inversores bien posicionados para aprovechar los incentivos fiscales y otros incentivos relacionados.

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